¿En qué cocinamos?
Yanina y Agustina, emprendedoras jujeñas, visitaron el estudio de ZetaTv para explicarnos por qué algunos materiales que utilizamos comúnmente para cocinar pueden ser perjudiciales para la salud, además de la perdida de nutrientes de los alimentos.
“El tema es ¿dónde cocinamos?, ese es el gran interrogante, porque por ahí siempre hacemos hincapié en qué compramos, siempre elegimos las mejores cosas, pero ¿dónde lo cocinamos?”, pregunta Yanina.
“Cada material va a tener algo, en el aluminio tenemos un excelente conductor de calor, en el acero tenemos la durabilidad, y es a largo periodo, pero también tenemos que tener en cuenta sus desventajas”. El aluminio “es un material blando, y es poroso, entonces todo el tiempo esta despidiendo partículas, que nosotros no las vemos, pero que indirectamente las consumimos”.
Nos comentaron que, además de los riesgos de oxidación en los utensilios y ollas de hierro, es muy común el uso del teflón que “es una capa de pintura que se creó para cubrir los tanques de guerra y las armas en un contexto de la segunda guerra mundial”, al final de la guerra “se decide comercializar el sobrante y ahí es donde la industria decide plasmarlo en los utensilios de cocina, y al mismo tiempo sale el boom del huevo frito que no se pegaba”, pero comentan también que las capas de la estructura de estos utensilios están pegados con un pegamento que desprende “una sustancia cancerígena, pueden googlearlo, buscarlo, es por este motivo que las ollas de teflón se empezaron a prohibir en algunos países de Europa y en Estados Unidos”.
Además de la contaminación que podemos encontrar en los alimentos por el uso de estos materiales y teniendo en cuenta también patologías como la celiaquía, “evitar la contaminación cruzada con otro tipo de material seria lo esencial, que es diferente, lo vemos”, la alternativa “es el acero quirúrgico, lo conocemos por la nobleza, por lo bueno del material, trabajan los doctores, entonces eso nos habla de lo bueno del material”, sugirió Agustina como respuesta y propuesta también de concientización para el cambio en las prácticas de cocina cotidianas.