Ley de alquileres: modificaciones y recomendaciones
Con media sanción en el Congreso, el proyecto de modificación de la ley de alquileres presenta cambios tendientes a desactivar la crisis habitacional que amenaza a locadores y locatarios.

Según la Ley de Alquileres vigente, el plazo mínimo para los contratos de alquiler de vivienda es de 3 años. En los contratos el precio del alquiler se debe fijar como valor único, por períodos mensuales y solo se pueden realizar ajustes anuales con una fórmula compuesta en un 50% por la evolución de los salarios (índice Ripte) y 50% por la evolución de la inflación que mide el Indec (IPC).
Esta normativa, sumada a la alta inflación del país, provocó que quienes debían realizar el ajuste anual durante en el mes de agosto lo hicieran con un incremento del 109% en los contratos.
En este marco, Marcela Infante, secretaria de Derechos Humanos de Jujuy, consideró que la ley de alquileres del 2020 “generó cambios en el mercado inmobiliario tales como aumentos por fuera de lo establecido, preferencia por los alquileres temporarios y una crisis habitacional”.
Infante consideró a la ley de alquileres como “la más afectada por la inflación y falta de previsibilidad que atravesamos. Si bien desde la Cámara de Diputados vimos que se le dio un trato rápido al proyecto de modificación, no parece haber un acuerdo entre los distintos bloques que conforman ambas cámaras para solucionar el problema”.
“Así, entre las propuestas de modificaciones a la ley, se encuentran: reducir el contrato a 2 años y actualizaciones “libres” cada 4 meses, eximir del impuesto a Bienes Personales a los inmuebles destinados a alquiler, eximir de impuestos a los débitos y créditos bancarios destinados a operaciones inherentes a alquiler de casa-habitación”, sostuvo la abogada.
Por último, Infante recomendó: “hasta que no entre en vigencia una nueva ley de alquileres, pueden prorrogar el contrato negociando el monto del alquiler con sumas que no sean perjudiciales para ninguna de las partes”