Vinos que cuentan historias, una apuesta por el turismo con identidad
Comenzó una capacitación gratuita para potenciar las rutas del vino de altura a través del conocimiento, la experiencia y la formación profesional.

El lunes 21 de julio se puso en marcha el curso “Enoturismo y el Desarrollo de la Ruta del Vino”, una iniciativa destinada a guías, informantes turísticos y profesionales del sector. A lo largo de tres jornadas intensivas, busca fortalecer la promoción de los vinos de altura como producto turístico emergente y de identidad local.
La propuesta —presencial, gratuita y con cupo limitado— está dirigida especialmente a guías de turismo, informantes de oficinas de información turística y estudiantes. Es organizada por la Secretaría de Turismo, el Colegio de Profesionales Universitarios en Turismo y cuenta con el respaldo de la Universidad Nacional de Jujuy y la Asociación de Guías de Turismo. Las próximas jornadas se realizarán los días 23 y 25 de julio.
Durante el acto inaugural, Diego Valdecantos, secretario de Turismo, remarcó la importancia de contar con profesionales capacitados para comunicar con solidez este producto en expansión: “el turismo no es solo paisaje, también es cultura y producción. Este producto tiene visibilidad nacional y necesitamos guías que conozcan en profundidad lo que presentan y cuenten con una sólida formación”, sostuvo.
La encargada de dictar el curso, la licenciada Luciana Uro, cuenta con una amplia trayectoria en el ámbito del enoturismo y el trabajo con bodegas. Durante la apertura explicó: “el curso tendrá una parte teórica, otra práctica y una instancia intermedia con trabajos grupales. Esperamos que tenga una buena recepción, porque el enoturismo es una actividad que está creciendo mucho en nuestra provincia”, señaló.La Ruta del Vino —que abarca los circuitos de Quebrada y Valles— se posiciona como una de las propuestas turísticas con mayor proyección en la región. Con el impulso de esta formación, se espera no solo profesionalizar a quienes la integran, sino también enriquecer la experiencia del visitante, vinculando el paisaje con las historias, sabores y saberes que dan vida al vino de altura.