Vanina Aquino: “Hasta el último día seguiré bailando y sanando”
Con 36 años, cuatro hijos y muchos prejuicios por vencer, Vanina Aquino encontró en la danza contemporánea un camino de sanación. Fue parte de la obra Ecos del Silencio, que emocionó al público en Perico.

La artista jujeña Vanina Aquino desafió prejuicios y limitaciones personales para entregarse de lleno a la danza contemporánea. “Empecé a estudiar a los 36 años, con hijos y con miedos, pero rompí las barreras que me frenaban”, recordó.
Aquino fue una de las intérpretes de “Ecos del Silencio”, la obra dirigida por Mayra Flores que se presentó el pasado 27 de septiembre en el Teatro Estación Perico. El montaje abordó la desconexión social y personal que vivimos en la actualidad y dejó al público profundamente conmovido.
“Hubo espectadores que salieron llorando. También a mí me atravesó. Al principio ensayábamos frente a un espejo, y no es fácil confrontarse con la propia imagen. Me generó ganas de llorar, pero también fue un proceso de sanación”, relató.
La bailarina asegura que la danza es, para ella, un camino espiritual: “Dios fue mi sostén para romper prejuicios. El arte sana, y hasta el último día seguiré bailando y sanando”.