El velatorio del Banco Central

El contador Raúl Attié nos da su mirada del contexto económico turbulento en la Argentina luego de las elecciones presidenciales, con el potencial cierre del BCRA.

El presidente electo Javier Milei tiene grandes desafíos para resolver los problemas históricos que tiene la economía de nuestro país. Debemos preguntarnos, plantea Attié, si Milei sabe de economía y si este sabe a quien va a poner al frente de este ministerio.

Por lo que se sabe hasta ahora, seria Luis “Toto” Caputo quien ocuparía el rol de ministro de economía, así que este deberá tomar las decisiones pertinentes junto al presidente electo. Milei con Caputo vienen hablando hace tiempo, por lo que sería un hombre de su confianza y no una imposición del ex mandatario, Mauricio Macri.

Javier Milei es pragmático en virtud de lo que Argentina necesita en estos momentos, pese a que es definido por muchos como alguien teórico. Él sabe para dónde va, pero cuando algo se frena o hay un obstáculo lo sabe sortear o resolver, declaro Attié.

La eliminación del Banco Central y la liquidación de las leliqs son algunas de las propuestas más complejas que quiere llevar a cabo Milei. El Banco Central es una institución que tiene un balance, tiene un pasivo (deudas) y un activo (lo que tiene para cobrar). Dentro de los pasivos, están sus deudas (la plata que está circulando en la economía, el dinero físico), las leliqs (depósitos de los bancos en el BCRA, que son pasivos no remunerados que no generan intereses).

Mientras más dinero circule en la calle, mejor para el Central. Los bancos son sus deudores. Ahora, ¿de dónde sacaron esa plata los bancos? De los depósitos, los acreedores de primer nivel, los depositantes. Es por esto que si el Central cerrara, las leliqs deberían ser liquidadas a través del BCRA, dado que los bancos no tienen dinero propio.

Entre sus activos, el Central tiene dólares, reservas en oro, bonos, swaps chinos. Ahora Attié pregunta; ¿a quién le presto más dinero el Banco Central? Este presto y hasta imprimió dinero a cambio de letras del tesoro nacional. La mayor parte de los activos del Central son letras, es decir pagares que el Gobierno nacional le firmó a cambio de dinero.

Algo que podría llegar a hacer esta nueva gestión de gobierno es, estas letras cambiarlas por bonos, que se podrían vender. Pero ¿es bueno salir a vender hoy o es mejor esperar a generar una buena reputación? Demostrar que estamos haciendo las cosas bien. Todavía no tenemos reputación, la tasa seria alta, dijo el contador.

Pensando en el efecto que generarían medias como estas, en un primer momento, dejas de perder, los salarios dejan de perder, empiezan a alcanzar los precios de bienes y servicios, afirmo Attié.

Al estabilizarse la economía, la dinámica de los sueldos hace que haya movilidad laboral, la gente hoy no sabe si es bien remunerada, hay una movilidad que propone quedarse con lo que se tiene antes que aventurarse a buscar algo nuevo.

El gobierno actual de Alberto Fernández, no tomaría estas decisiones porque conceptualmente no están de acuerdo. Plantean que el Estado debe seguir insistiendo, consideran que dolarizar implica perder la capacidad de tener política monetaria, que no es un dato menor, no todos los estados están dispuestos a esto. Argentina hizo todo mal, no sabe ahorrar, uso al Banco Central para emitir dinero.

En otro orden de cosas, el contador se refirió a otras medidas que se ejecutarían luego de la asunción de Milei a la presidencia. Hay que tener un rango de prioridades, menciono Attié. Si bien los gobiernos justicialistas proponen el enunciado ¨donde hay una necesidad hay un derecho”, en la práctica es algo más complejo. “Te acepto la conectividad que aporta tener una aerolínea de bandera, solo si no hubiesen personas muriéndose de hambre en nuestro país. Si todos los pibes están comiendo, podemos hablar de conectividad”, opinó el especialista. Cuando todos los argentinos tengamos todos los servicios básicos, te tomo la conectividad, y mantener la tv publica, paka paka, etc., cerró.